Lorca, 17 de junio de 2025 – La portavoz del Partido Socialista en Lorca, Isabel Casalduero, ha realizado un balance severo de los primeros dos años de mandato del actual equipo de gobierno, conformado por Partido Popular y Vox, calificándolo de «periodo de estancamiento y retroceso» marcado por subidas de impuestos, despilfarro de recursos públicos y un grave deterioro en los servicios básicos para los vecinos.
Desde que Fulgencio Gil asumió la alcaldía en 2023, el panorama de la ciudad ha sido descrito como más sucio, inseguro y abandonado, con un aumento del 3,5 % en las tarifas del agua y del 22 % en la recogida de basura, sin mejoras en los servicios públicos y con una gestión económica intervenida tras la entrada del Ayuntamiento en un Plan Económico Financiero. Casalduero denuncia que «el alcalde ha incumplido sus promesas de reducir impuestos y ha gastado más de tres millones de euros por encima del presupuesto, poniendo en riesgo la estabilidad económica municipal».
El deterioro en las pedanías y en los aspectos culturales también fue resaltado por la portavoz socialista, quien afirmó que “más del 90 % de las inversiones previstas de 10 millones de euros no se han ejecutado, mientras que las infraestructuras básicas y los servicios en los barrios siguen en deterioro”. Igualmente, criticó los recortes en cultura, con la eliminación de espacios públicos y la desaparición de la Banda Municipal, además de la inacción en ámbitos como la juventud, la educación y el transporte.
Casalduero también acusó al equipo de Gil de mantener un silencio cómplice ante problemas cruciales en sanidad, resaltando que «Lorca tiene una de las listas de espera más largas en la Región y el Centro de Salud de San Cristóbal sigue sin construirse». Asimismo, denunció la opacidad en la gestión municipal, afirmando que «la alcaldía se ha convertido en un búnker, y para conseguir cita con el alcalde hay que esperar meses, ante un total oscurantismo en la información pública, incluso obligado por decisiones judiciales».
La socialista recordó que muchos de los proyectos en marcha, como el AVE, el Palacio de Justicia o la escuela infantil de San Antonio, son herencias del anterior gobierno socialista, y que «el trabajo hecho entonces continúa siendo clave para la recuperación y el desarrollo de Lorca hoy día».
Finalmente, Casalduero subrayó que el Partido Socialista seguirá trabajando desde la oposición con responsabilidad y propuestas, defendiendo un modelo de gestión basado en el consenso y en el interés general de los vecinos, sin necesidad de recurrir a medidas extremistas, y abogando por una visión de futuro para Lorca.
Este balance refleja una crítica contundente a la gestión del actual equipo de gobierno, y evidencia la percepción generalizada de que Lorca necesita una etapa de liderazgo fuerte, transparencia y compromiso con las necesidades de sus ciudadanos.