El fuerte viento, que afectaba con intensidad sobre todo a Purias, provocaba una tormenta de arena, lo que dificultaba la visibilidad
Los equipos de Emergencias Municipal y Bomberos trabajaban hasta altas horas de la noche para retirar las ramas de las calzadas con ayuda de radiales
La caída de ramas sobre los tendidos provocaba cortes en el fluido eléctrico y telefónico que se recuperaba casi de inmediato
Seis tornados provocaban en la tarde de este sábado la caída de árboles y ramas por distintas pedanías del municipio, con especial incidencia en las de Purias, Cazalla, Campillo y Almendricos, aunque también en la Ciudad se registraban hechos puntuales. Algunos árboles y ramas quedaban sobre los tendidos eléctrico y de telefonía, lo que dejaba sin fluido a los vecinos más inmediatos, aunque rápidamente se lograba restablecer prácticamente en su totalidad el servicio por parte de las compañías suministradoras.
En el Servicio Municipal de Emergencias se recibían decenas de llamadas alertando de la caída de árboles, ramas, carteles de publicidad y el desplazamiento de contenedores y vallas de obras por las pedanías de la huerta, aunque también en la Ciudad se dejaban sentir los efectos. “Ha sido generalizado. Los avisos no cesaban de entrar y se iban atendiendo conforme a su importancia. Hemos tenido varias caídas de árboles, abundantes ramas de gran tamaño que han quedado resquebrajadas y que se han tenido que retirar con ayuda de radiales, por parte de efectivos del Consorcio de Extinción de Incendios, postes eléctricos y de telefonía que han cedido por el peso de ramas sobre el cableado y desplazamientos de contenedores y vallas. Todos los efectivos, de Policía Local, Servicio Municipal de Emergencias, Protección Civil, Bomberos… estaban atendiendo algún requerimiento”, explicaba el edil de Emergencias, Antonio David Sánchez.
El edil, junto a la teniente de alcalde María de las Huertas García, supervisaba los trabajos, aunque también se sumaban a la retirada de ramas caídas en la calzada, como ocurría en el Camino de Felí. En la Ciudad se desprendía un toldo desde la quinta planta de un edificio, cayendo a la vía pública. Y desde Almendricos alertaban de obstáculos en la calzada y la poca visibilidad por la tormenta de arena. “Las rachas de viento han llegado a ser tan fuertes que se han desplazado contenedores de basura hasta 50 metros. Alguno ha sido lanzado, literalmente, a bancales muy lejanos del lugar que ocupaban”, detallaba el edil de Emergencias.
Y en la urbanización Torre del Obispo se desprendía un cartel publicitario de grandes dimensiones. El equipo de señalización de la Policía Local se afanaba en recolocar las vallas de distintas vías en obras, como afirmaba el edil de Seguridad Ciudadana, Juan Miguel Bayonas, que también participaba en las labores. “Se han convertido en obstáculos en la vía pública que ha habido que recolocar en los lugares que ocupaban. Agradecer la colaboración de los conductores que nos alertaban de estas situaciones y, nos consta, que incluso han procedido a reubicar este tipo de señalizaciones”.
Entrada la noche los equipos de emergencias continuaban trabajando. En la antigua carretera de Águilas, en Purias, los Bomberos precisaban de radiales y del vehículo escala para llegar a lo más alto de varios ejemplares de los que se habían resquebrajado grandes ramas que caían sobre la valla de una vivienda y varios tendidos.