Se han invertido más de 785.000 euros y las obras han permitido ubicar de forma definitiva la Unidad de Rehabilitación Cardiometabólica
Las obras de mejora y ampliación de las plantas baja y primera del Centro de Salud Lorca-Centro y de Especialidades Santa Rosa de Lima, en Lorca, han concluido, lo que ha permitido dotar de nuevos espacios para la mejora de la calidad asistencial. Así, se han invertido más de 785.000 euros entre obras y adquisición de equipamiento clínico y mobiliario.
En la planta baja, donde se ubican los servicios del centro de salud, se ha actuado sobre el área administrativa y de recepción para remodelar y ampliar las instalaciones dedicadas a la Atención Primaria.
Las obras efectuadas en la primera planta han permitido dotar al Centro de Especialidades de 12 nuevas consultas polivalentes y ubicar de forma definitiva la Unidad de Rehabilitación Cardiometabólica, que se inauguró hace justo un año.
“Estas obras mejoran la comodidad de los pacientes y los profesionales e, indudablemente, aumentan la calidad asistencial”, resaltó el consejero de Salud, Juan José Pedreño, en su visita a Lorca hoy.
Asistencia a 150 pacientes al año
Pedreño explicó además que, tras las obras de acondicionamiento de la primera planta del Centro de Especialidades Santa Rosa de Lima, la Unidad de Rehabilitación Cardiometabólica cuenta ahora con un espacio más amplio para las máquinas, además de zonas polivalentes para las consultas. Está preparada para atender a 150 pacientes al año.
La rehabilitación cardiaca es una técnica terapéutica recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y se puso en marcha hace ahora un año.
Se pretende con ello aumentar la calidad de vida de los pacientes del área III de Salud con tensión arterial alta, diabetes o altos niveles de colesterol gracias a un programa de ejercicio físico pautado, supervisado y controlado por profesionales sanitarios de cuatro especialidades: Cardiología, Nefrología, Nutrición y Endocrinología.
La unidad cuenta con bicicletas estáticas de cinta completas y un remo de cinta con sus correspondientes transmisores de medición, monitor de presión arterial, licencias y un módulo de monitorización de pacientes. Este equipamiento supuso una inversión de 45.000 euros.