La única concejal de Vox presente en el Ayuntamiento de Puerto Lumbreras, Jerónima María Reinaldos y, además parte del equipo de gobierno registró una moción en contra de la inmigración ilegal el pasado mes de mayo.
Uno de los extremos de la propuesta de pleno engloba precisamente lo mismo que ayer hizo tambalear y romper los pactos en todas aquellas Comunidades Autónomas en las que PP y Vox gobiernan: los “MENAS”.
En concreto, una propuesta de acuerdo recogida por la concejal de Vox establecía que resulta una necesidad:
“Tomar todas las medidas necesarias para proceder al cierre de los centros de menores extranjeros no acompañados (MENAS) que crean inseguridad en nuestras calles, empezando por los más conflictivos. Todos los menores extranjeros deben ser repatriados con sus padres, familiares o entorno íntimo a sus países de origen de forma inmediata. Hasta lograr su cierre, procuraremos las medidas e infraestructuras necesarias para garantizar la seguridad de los trabajadores de estos centros, la existencia de espacio suficiente y la seguridad de los vecindarios aledaños”.
Medida que el Partido Popular no fue capaz de votar en contra, optando por la abstención, sin justificación alguna. No siguieron la línea de actuación moderada que desde el nacional están siguiendo. No se desvincularon rotundamente de la deshumanización que sus socios de gobierno están consiguiendo. Es importante matizar además que, la única concejal de Vox, aparte de ser la segunda teniente de alcalde, cuenta con competencias en seguridad ciudadana y emergencias, al igual que el recién exvicepresidente de la Región de Murcia y su superior directo, José Ángel Antelo.
En cambio, en Puerto Lumbreras lo único que parece importarle al equipo de gobierno es guardar y mantener su asiento, sus competencias, sin existir entre ellos una correcta coordinación, ni una línea de actuación en común, ni un proyecto claro al respecto.
Asimismo, es de destacar también que el PSOE lumbrerense fue el partido que más respaldo recibió en número de votos en este municipio tras las últimas elecciones municipales, otorgándole la legitimidad superior para dirigir el ayuntamiento, que a día de hoy cuenta con un pacto PP-Vox que está expectante y preocupado de lo que ocurre a su alrededor.