Sosa plantea en nombre de su coalición de izquierdas una batería de propuestas para sanear el sector público local, para hacerlo más justo, más eficiente y más democrático.
Propone crear una única empresa de servicios públicos locales que englobe el ciclo del agua, la promoción de suelo y vivienda, la limpieza viaria, los parques y jardines y el transporte público local con la ORA
Esta mañana, con la reunión del Consejo de Administración de LIMUSA, previa a su Junta General, se abre todo el ciclo de reuniones de lo que podría considerarse el “sector público local”. Un sector, con sus servicios y empresas públicas y mixtas, que en este último mandato corporativo ha sido objeto por primera vez en la historia de Lorca de una merma democrática derivada del acuerdo entre PP, PSOE y VOX para excluir a Izquierda Unida, y a su coalición municipal, de su representante en los consejos de administración de LIMUSA, SUVILOR y Aguas de Lorca.
Sosa ha exigido su vuelta a los consejos de administración y que la representación política que le ha dado el pueblo de Lorca, aunque sea escasa, se garantice en su exacta proporción en todos los órganos municipales, incluidos los consejos de administración de esas empresas aludidas. Ha recordado en tal sentido el compromiso incumplido hasta la fecha tanto del alcalde, como del PSOE, de acceder a implantar en los consejos de administración el” voto ponderado” para que no haya nadie ni con más ni con menos representación de la que le ha dado el pueblo de Lorca.
El edil de izquierdas mantiene que “los principales servicios públicos municipales de Lorca están siendo mal gestionados, son caros, son ineficientes y cada vez actúan con más opacidad y menos democracia”.
Desde su expulsión antidemocrática de los consejos de administración, a consecuencia del “pacto antinatural” entre PP, PSOE y VOX, en opinión del concejal de izquierdas se ha producido una merma muy sensible en la calidad de la prestación de todos los servicios. Hace unos días veíamos el cielo de Lorca lleno del humo negro producido por el incendio de colchones y enseres en la planta vertedero de LIMUSA. Es la imagen de una empresa muy mal gestionada políticamente y con un margen de mejora enorme. La última propuesta que hicimos con relación a esta empresa consistía en intentar bajar los recibos de basura que pagan los lorquinos con la inclusión de las 1.500 viviendas de Lorca que no pagan la tasa de basura al no figurar en el padrón de ese tributo. Sosa afirma que cada año el Ayuntamiento deja de recaudar en torno a 120.000 euros anuales por esta deficiencia en la gestión pública en Lorca, que además se cargan al resto de contribuyentes lorquinos, ya que la legislación establece que las tasas (también las de la basura) se han de establecer teniendo en cuenta el coste real o previsible de los servicios o actividades afectadas. Y esta circunstancia implica que si en Lorca hay 1.500 viviendas que no pagan la tasa de basura, ese importe no cobrado se prorratea en los recibos que pagan el resto de contribuyentes lorquinos. Una auténtica injusticia tributaria que llevamos años denunciando.
Por lo que hace a Aguas de Lorca, el edil de izquierdas ha recordado que cada vez que se reúnen los “mandamases” de esta empresa con todos los grupos políticos, salvo con el suyo ya que el acuerdo de PP, PSOE y VOX, también los excluyó de aquí, es para que los lorquinos paguen más cara el agua de los grifos y el saneamiento, y para que la parte privada de la empresa gane más dinero.
Sosa ha recordado su oposición a la última subida de los recibos del agua; una subida sobre la que ha realizado varias consideraciones:
1ª.- Esta subida es posible porque hace 27 años el PSOE y el PP decidieron vender el servicio público del agua en Lorca a una multinacional del negocio del agua, lo que ha provocado un escandaloso incremento de los recibos que pagan los ciudadanos en estas casi tres décadas.
2ª.- Una subida que sigue siendo posible hoy en día porque, durante estos 27 años, se ha dejado solos a los concejales de IU en la defensa del rescate y la remunicipalización del servicio, y también en defensa de una revisión lógica del accionariado de la empresa en función de la naturaleza (pública o privada) de las inversiones que se han ido produciendo en el servicio en todo este tiempo y que han sido, casi en un 100%, con dinero público.
3ª.- Una subida que también posibilita la falta de control público sobre los costes del servicio, que pueden estar inflándose artificialmente cuando la empresa privada contrata bienes, obras y servicios a empresas filiales, creadas por ellos mismos al efecto, en lugar de sacar las mismas a licitación y concurrencia pública.
Por último, apunta Sosa, tenemos a SUVILOR. Una empresa igualmente mal gestionada. Sosa ha explicado que tras la prolongadísima, costosísima e interrumpida liquidación y posterior “reflotamiento” de SUVILOR, ha pasado el tiempo suficiente para que los lorquinos puedan contar con una especie de balance que arroje luz sobre el trabajo que se ha hecho en esta empresa municipal y de qué manera ha redundado en el interés general de los lorquinos y en la facilitación del acceso de los mismos al derecho a la vivienda. Algo que, tras su exclusión del seno del consejo de administración, preguntó en el Pleno del Ayuntamiento del pasado mes de mayo, y sobre lo que aún espera respuesta.
Sosa plantea en nombre de su coalición de izquierdas una batería de propuestas para sanear el sector público local, para hacerlo más justo, más eficiente y más democrático. Y la fundamental será la creación de una única empresa de servicios públicos locales que englobe el ciclo del agua, la promoción de suelo y vivienda, la limpieza viaria, los parques y jardines y el transporte público local con la ORA.