Frutales de secano, olivos y vides serán los próximos perjudicados por la falta de lluvias
La organización profesional agraria Coag ha publicado un informe sobre el impacto de la sequía en el sector agrario. En él se afirma que la falta de lluvias ya afecta al 60% del campo español y produce pérdidas irreversibles en más 3,5 millones de hectáreas de cereales de secano. En el caso de la Región de Murcia, la situación está calificada de “extremadamente grave” y se dan por completamente perdidos los cereales.
La producción de cereal en la Región ronda, tradicionalmente las 140.000 toneladas en unas 48.000 hectáreas de secano.
En cuanto a los leñosos (frutales, olivos y vides, entre otros), y ante la previsión de que no se produzcan lluvias en, al menos, los próximos 15 días, van a ser los siguientes afectados, incluso llegando a temerse por el propio árbol en las zonas de menor altitud.
En cuanto a la ganadería extensiva, Coag afirma también que se encuentra en abandono y que se están detectando masivas ventas de explotaciones.
Respecto al conjunto de España, la organización agraria da prácticamente por pérdidas las cosechas de trigos y cebadas en Andalucía, Extremadura y Castilla-La , además de Murcia, y en las zonas más áridas de Aragón, Cataluña y Castilla y León.
Sobre cultivos leñosos, como frutos secos o viñedos de secano, ya se están experimentando problemas en la brotación. En el olivar, la situación puede complicarse si no hay precipitaciones en las próximas semanas.
En el regadío también preocupan las restricciones en la dotación de agua, que mermarán las siembras de verano y harán que muchos agricultores opten por reducir la superficie de maíz, girasol, arroz y algodón.
La ganadería extensiva, principalmente la cabaña ovina, es otra gran perjudicada por la sequía. Si no llueve no hay pastos para poder alimentar a las ovejas y esto obliga a que los ganaderos tengan que recurrir a la compra de pienso y forraje para mantener a sus animales.
Una situación muy similar es la que atraviesan los apicultores. La falta de vegetación y floración en los montes impide que las abejas puedan alimentarse y producir miel. Y con esta, sería la tercera campaña sin cosecha para estos profesionales.