El alcalde, Fulgencio Gil, protagoniza la rúbrica del documento, que atiende a fórmulas de sensibilización pero también al régimen sancionador
Su principal objetivo es erradicar en la sociedad comportamientos de maltrato o abandono con los animales de compañía y prácticas incívicas que puedan afectar a otros ciudadanos
Fulgencio Gil, alcalde de Lorca: “Policía Local, concejalía de Sanidad, empresa de recogida de animales abandonados y protectoras trabajan conjuntamente para que no haya un solo animal vagando por nuestro municipio; y la empresa municipal de limpieza vela por mantener nuestras calles limpias, pero todo esto resulta en vano si no colaboramos todos en aras de una mejor convivencia y respeto”
“No puede ser que en los tiempos que corren haya mascotas sin chip o que sean maltratadas o abandonadas, esta es una preocupación que compartimos con las protectoras. Ni tampoco que haya dueños que no respeten las normas mínimas de cuidado animal y lleven a cabo prácticas incívicas e insalubres con el perjuicio que supone para el conjunto de la sociedad. Por eso, vamos a dirigir nuestros esfuerzos en disponer todos los mecanismos que estén a nuestro alcance para evaluar las condiciones de vida de los animales domésticos en nuestro municipio. Y vamos a ofrecer toda la información necesaria, pero también vamos a ser firmes en el momento de implementar las sanciones que contempla la ley”.
Así lo ha trasladado el alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, que ha protagonizado la firma de un bando en el que no sólo recuerda la legislación actual vigente, sino que también apela a la necesidad de una mayor concienciación por parte de la ciudadanía en.
“Lo que buscamos con este edicto, entre otras actuaciones, es impregnar a la sociedad lorquina de una mayor consideración y responsabilidad en relación al bienestar animal. Policía Local, concejalía de Sanidad, empresa de recogida de animales abandonados y protectoras trabajan conjuntamente para que no haya un solo animal vagando por nuestro municipio; y la empresa municipal de limpieza, LIMUSA, vela por mantener nuestras calles y plazas limpias, intentando que excrementos y orines no dañen el mobiliario urbano ni ensucien nuestras fachadas. Pero todo esto resulta en vano sin la colaboración de los vecinos de nuestro término municipal para mejorar la convivencia y fomentar el respeto hacia los seres vivos, evitando situaciones que pongan en riesgo sus vidas”, ha indicado en el escrito.
De esta manera, el Gobierno de Lorca reitera, una vez más, su firme compromiso ante la defensa del bienestar animal. “Quiero recordar, además, que hemos duplicado el presupuesto anual para atender animales abandonados por parte de la empresa de recogida, alcanzando una partida que 340.000 euros, el importe más alto de la historia; un récord a nivel municipal que incluye la garantía del sacrificio cero, así como la asistencia veterinaria a los animales, su adecuado traslado, atención veterinaria, su correcto chipado y el cumplimiento estricto de toda la legislación relacionada”.
Actualmente, la Ley 7/2023, de 28 de marzo, de protección de los derechos y el bienestar de los animales complementa y amplía la actual legislación de Régimen local así como la Ley 6/2017 de 8 de noviembre, de protección y defensa de los animales de compañía de la Región de Murcia, e incluye una serie de obligaciones para los propietarios de animales de compañía, entre las que destacan la obligatoriedad de identificación con microchip y vacunación frente a la rabia de perros, gatos y hurones, la comunicación a la Administración local de la pérdida o sustracción del animal en el plazo máximo de 48 horas, o que no depositen sus excrementos y orines en lugares de paso habitual de otras personas; y atiende a otras prohibiciones ante el maltrato y el abandono o mantenerlos atados, o criarlos o venderlos sin estar inscritos en el Registro de Criadores de Animales de Compañía.
“Como administración local, en el marco de lo previsto en la Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen Local, afrontaremos la problemática que conlleva el abandono y el déficit ante la responsabilidad del chipado de las mascotas, llevando a cabo el procedimiento sancionador, como nos compete. Dicha ley, en su artículo 74, establece que tanto el abandono de uno o más animales como el no cumplir las obligaciones de identificación se tipifican como infracciones graves, con sanciones que conllevan multas que van desde los 10.001 a los 50.000 euros. Es más, la comisión de más de una infracción grave en el plazo de tres años, conlleva la consideración de infracción muy grave, lo que puede suponer una multa de hasta 200.000 euros”.