Durante la inauguración del Foro Agro Santander, el presidente afirma que “no nos vamos a dar por vencidos y la batalla no está perdida»
El presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, resaltó hoy sobre el trasvase Tajo-Segura y la manifestación celebrada ayer en Madrid que “toda España ha escuchado la voz de la Región de Murcia y del Levante, y vamos a seguir haciendo que se nos escuche a nivel nacional”. Durante la inauguración del Foro Agro Santander para analizar los retos actuales del sector agrario, López Miras advirtió de los efectos del recorte “para todo el país”.
“Si España prescinde de las frutas y hortalizas que riega el trasvase, ¿Habrá suficientes? Y si las hay, ¿A qué precio estarán? Esto es algo que debe preguntarse un Gobierno que debe garantizar la soberanía alimentaria”, señaló López Miras. El jefe del Ejecutivo regional también alertó de las consecuencias medioambientales, al preguntarse “¿Cómo influye para la lucha contra el cambio climático perder un trasvase que riega 55 millones de árboles? ¿Cómo se va a explicar esto? Las decisiones políticas tienen consecuencias, y por eso deben estar avaladas por informes técnicos”.
En la lucha por evitar el recorte del trasvase que trae consigo el Plan Hidrológico del Tajo, López Miras aseguró que “no nos vamos a dar por vencidos y la batalla no está perdida, pero todos debemos defender el trasvase como algo indelegable, es decir, como algo que nadie puede delegar a Madrid”. Además, insistió en que “no podemos circunscribir el cierre de una infraestructura tan importante a un territorio en concreto o un sector en concreto. Esto afecta a todos”.
En cuanto a la decisión final del Gobierno central, el presidente advirtió de que “debemos ser realistas: si han sido capaces de rebajar delitos como el de malversación o derogar la sedición, no les van a doler prendas a la hora de recortar un 50%”. Pese a ello, llamó a “no caer en el desaliento”, porque “precisamente por esa falta de avales técnicos que tiene el recorte, están a tiempo de reflexionar y revertir su decisión”.
Para López Miras, el trasvase es “la infraestructura más solidaria y que más ha aportado social y económicamente a España en los últimos 44 años”, y por ello pidió que, al igual que se hace en la Región de Murcia, el resto del país también valore “su enorme trascendencia” y se cuestione “lo que supone perder el Tajo-Segura”.
“Yo sí sé lo que supone prescindir del trasvase para la Región de Murcia: supone perder más de 25.000 empleos directos y hasta 100.000 indirectos, sé lo que supone para miles de familias, sé lo que supone para nuestra balanza comercial, y sé lo que supone no sólo para el sector agroalimentario, sino para todo el tejido económico y social”, afirmó el presidente.
En cambio, “el Gobierno central no se ha preguntado los efectos que tiene prescindir del trasvase para su balanza comercial o para el crecimiento económico de España, porque si lo hubiera hecho no habría tomado esta decisión, que no está respaldada por ningún criterio objetivo ni ningún documento científico”.
En referencia a esos efectos económicos para todo el país que el Gobierno central debería tener en cuenta, López Miras citó los 18.000 millones de euros en exportaciones de frutas y hortalizas que a día de hoy producen Murcia, Almería y Alicante; la repercusión en el abastecimiento de alimentos, o las consecuencias que puede tener para el consumo de agua en los hogares.
El presidente criticó que “el Gobierno central no tiene un Plan Hidrológico Nacional, como es su obligación, ni tiene voluntad de alcanzar un Pacto Nacional del Agua”. También lamentó que “la única decisión firme que han tomado en materia hídrica hasta el momento es la de acabar por encima de todo y de todos con el trasvase Tajo-Segura”.
Otros obstáculos
Para López Miras, el actual es “un momento especialmente sensible para la agricultura, de máxima incertidumbre a nivel internacional y nacional”, en el que “debemos reivindicar el papel fundamental que el sector desempeña en el día a día de la Región”. Esa incertidumbre se plasma, además de en la falta de agua, en “la nueva PAC, el incremento de los precios, de los costes de producción y de las materias primas, que han afectado de manera más grave a la Región”. En cuanto a las decisiones políticas del Gobierno central para paliar estos problemas, afirmó que “llegan tarde, llegan mal o no llegan”.