Habían instalado invernaderos subterráneos a los que se accedía a través de plataformas elevadoras hidráulicas ocultas
La Guardia Civil ha desarticulado un grupo criminal en Alguazas que mantenía, en dos fincas dedicadas al cultivo de plantas ornamentales, sendos invernaderos subterráneos destinados al cultivo y secado de marihuana, donde han sido aprehendidas 2.300 plantas de cannabis sativa, 30 kilos de cogollos, 2.000 litros de combustible, productos fitosanitarios robados y los útiles necesarios para llevar a cabo su cultivo indoor.
A cinco de los detenidos se les atribuye la presunta autoría de los delitos de cultivo y elaboración de droga, a un sexto, además, delito de robo de uso de vehículo a motor y de robo con fuerza; y a los dos cabecillas, además, delito contra el derecho de los trabajadores.
La investigación se inició el pasado mes de abril, cuando la Guardia Civil supo del robo de grandes cantidades de productos fitosanitarios de un almacén ubicado en la pedanía murciana de Cobatillas.
Los investigadores conocieron que el robo se cometió con el método del alunizaje, empleando para ello una furgoneta que había sido sustraída de una empresa de alquiler de vehículos.
Las pesquisas permitieron ubicar este vehículo en los aledaños de unos invernaderos dedicados al cultivo de plantas ornamentales, en un paraje rural de Alguazas.
Ante las sospechas de que los productos fitosanitarios sustraídos tuvieran como destino final esas instalaciones, se dispuso de un operativo de vigilancia.
De esta forma, la Guardia Civil obtuvo información suficiente para sospechar del posible cultivo de marihuana en la finca. Las parcelas estaban valladas y dotadas de medios activos de vigilancia como cámaras, alarmas y perros adiestrados, todo lo cual fue puesto en conocimiento de la autoridad judicial quien otorgó los mandamientos de entrada y registro.
Plataformas hidráulicas para bajar a los búnkers
Recientemente, la Guardia Civil llevó a cabo el registro de las dos fincas, en una de los cuales los agentes hallaron, oculta detrás de una pared, una plataforma elevadora mediante un sistema hidráulico que permitía bajar a otra estancia subterránea de unos 200 metros cuadrados.
En ese recinto, la Benemérita localizó hasta 30 kilogramos de cogollos de marihuana, en proceso de secado, así como la práctica totalidad de los productos fitosanitarios sustraídos del almacén de Cobatillas, identificados éstos mediante su número de lote y valorados en cerca de 10.000 euros.
A escasos 200 metros de este primer enclave, los agentes accedieron a otra nave agrícola donde también se localizó, detrás una pared falsa, un elevador hidráulico que comunicaba la nave con otra estancia inferior de unos 400 metros cuadrados, donde fueron localizadas 2.300 plantas de cannabis sativa.
En esa hermética estancia se sorprendió a cinco personas que supuestamente se encontraban realizando tareas de cultivo, mantenimiento y manipulación de las plantas.
Supuesta actividad delictiva continuada
En otro almacén superficial, los investigadores hallaron 15 equipos de aire acondicionado nuevos, 1.000 litros de combustible y 2.000 litros de potenciadores del crecimiento vegetal, distribuidos en 130 garrafas. A la vista de los restos de plantas cortadas que fueron localizadas en uno de estos almacenes y de la cantidad de material y productos incautados, la Benemérita les supone una actividad delictiva continuada.
La Guardia Civil también llevó a cabo el registro de los domicilios de los principales sospechosos: dos hermanos vecinos de Alguazas y Ceutí, donde se localizó abundante documentación relacionada con el entramado delictivo.