Se han instalado 70 unidades de cada clase, tanto en el casco urbano como en las pedanías
Están ubicados en áreas de aportación justo al resto de contenedores para las distintas fracciones de residuos generados en el hogar
El destino de la ropa y el calzado depositado en los contenedores es la reutilización y el reciclado
Limusa, empresa municipal de limpieza, ha dado un paso más en su compromiso con la recogida selectiva y ha ampliado el servicio que presta en Lorca con contenedores específicos para textil (ropa y calzado) y para aceite usado.
Según ha explicado el concejal de Limpieza, Juan Miguel Bayonas, “en una primera fase se han instalado 140 nuevas unidades (70 para textil y 70 para aceite usado) repartidas, tanto por el casco urbano como en las pedanías. Con esta nueva implementación, Limusa amplía sus servicios de recogida de residuos, mejorando la calidad del operativo hacia un servicio más sostenible”.
En términos generales, están ubicados en áreas de aportación justo al resto de contenedores para las distintas fracciones de residuos generados en el hogar.
Para gestionar este nuevo servicio, la empresa municipal ha completado un proceso de licitación del que ha resultado adjudicataria la firma especializada East West Productos Textiles que, además de los contenedores, aportará el personal necesario para su instalación y gestión. El contrato firmado tiene una duración de cuatro años.
En los contenedores de ropa, que son de color fluorescente como el principal del logotipo de la empresa municipal, se podrán depositar directamente prendas textiles de cualquier tipo, incluyendo zapatos y complementos. Las prendas serán recogidas para su reciclaje, con el objetivo que el material del que están hechos pueda volverse a utilizar en la fabricación de otras nuevas o, en las mejores prendas revertidas, a reutilización vía mercados de usados.
En el caso del aceite usado, los contenedores son de color naranja. En este caso, los usuarios deben portarlos siempre dentro de botellas de plástico bien cerradas por su tapón, que también se reciclan. El aceite usado se emplea, principalmente, para la fabricación de biodiésel.
No hay que olvidar que “el aceite de cocina es un residuo derivado de su uso en el hogar y no hay que verterlo en el fregadero el WC, puesto que la película de grasa que genera puede incrementar el peligro de que se obstruyan las tuberías, además de dificultar la oxigenación del agua y la opción de su depuración posterior. Por esto es tan importante que este tipo de residuo se recicle”, añadía el edil de Limpieza.
A través de Limusa, Lorca ya dispone de todas las opciones para una recogida selectiva completa: al papel y cartón (azul), envases de plástico, metálicos y briks (amarillo), vidrio (verde), biorresiduos orgánicos (marrón) y resto (gris), se suman ahora estas dos nuevas posibilidades de reciclaje.