El acto de reconocimiento resaltó su trayectoria como pionera en la medicina y su lucha contra la misoginia en un contexto histórico adverso.
El pasado fin de semana, la Casa de la Cultura de Águilas fue el escenario del emotivo acto oficial en el que se nombró a la doctora Ángela Santamaría como Hija Predilecta de la localidad a título póstumo, cumpliendo así con el acuerdo unánime del Pleno del pasado mes de julio.
El edil de Cultura, José Antonio Consentino, destacó que este reconocimiento busca resaltar la trayectoria profesional y la calidad humana de Ángela Santamaría Giménez, quien fue una de las primeras mujeres médicas de España y se desempeñó como inspectora de Sanidad en Águilas, enfrentándose a la misoginia predominante en su época.
Ángela Santamaría nació en Águilas el 23 de noviembre de 1903, siendo la segunda hija de los once vástagos del matrimonio formado por el Dr. Alejandro Santamaría de Paz y doña Ángela Giménez Gris. Completó su educación en escuelas unitarias femeninas en la localidad y, debido a la ausencia de un instituto de Bachillerato, estudió por libre, obteniendo su título en el Instituto General y Técnico de Murcia. Posteriormente, se trasladó a Granada para cursar estudios de Medicina, concluyendo su formación en la Universidad Central de Madrid.
Tras obtener su licenciatura, Ángela ayudó a su padre después de un trágico accidente ferroviario en Pulpí en 1927. Más tarde, se trasladó a Madrid para realizar su doctorado, destacándose en su formación científica en el Instituto Nacional Alfonso XIII bajo la dirección del Premio Nobel Santiago Ramón y Cajal. En 1928, fue nombrada médica en una compañía ferroviaria inglesa, y en 1930 obtuvo el tercer lugar en las oposiciones para Inspectores Municipales de Sanidad.
Se casó con Francisco Hernández Bocanegra en 1943 y solicitó un traslado a Caniles, donde ejerció como médica titular hasta 1973, compaginando su labor con largas temporadas en Granada y Águilas. Ángela Santamaría falleció el 8 de septiembre de 1998 a la edad de 95 años, siendo enterrada en el panteón familiar del cementerio municipal de Caniles.
El Ayuntamiento de Caniles también la nombró Hija Adoptiva en un acuerdo unánime del Pleno el 1 de febrero de 2024, reconociendo su labor como mujer científica y socialmente comprometida. Durante el acto, se destacó su dedicación a principios universales como la solidaridad, la empatía, y su trabajo en una época en la que la sanidad no era pública ni universal.
El evento culminó con una conferencia donde biógrafos de Santamaría, la doctora en Biomedicina Sol Monchón y el doctor en Historia y Artes Juan Antonio Díaz, realizaron un repaso de su faceta profesional y humana, aportando un valioso homenaje a su memoria y legado.