El proyecto aspira a transformar la actual traza ferroviaria, hoy barrera física entre barrios, en un corredor peatonal y ciclista arbolado, con usos deportivos, culturales y recreativos, conectado con las Alamedas y la red de carriles bici.
Una oportunidad urbana histórica
El alcalde, Fulgencio Gil, defenderá ante el Consejo Social de la Ciudad que el soterramiento de las vías y de la estación de Sutullena abre una “oportunidad histórica” para crear una gran Alameda Central que vertebre Lorca de extremo a extremo. La franja ferroviaria, que hasta ahora partía la ciudad en dos y colapsaba el tráfico con cada cierre de los pasos a nivel, se concibe como un espacio liberado que mejorará la conectividad entre barrios y actuará como pulmón natural.
Gil plantea “cambiar vías, hierros y piedras” por amplias zonas verdes con arbolado, vegetación, carril bici y áreas deportivas, culturales y de ocio familiar, integradas en la red de Alamedas y vías verdes del municipio. El diseño se abrirá a la participación de colectivos y ciudadanía para que el nuevo eje recoja las necesidades y propuestas de los vecinos.
Eje verde junto a equipamientos clave
La futura Alameda Central se apoyará en la recuperación del espacio que hoy ocupan la vieja estación de Sutullena, la nueva estación de AVE y Cercanías, el Coso de Sutullena, los monasterios de clarisas y San Diego, el Puente de Hierro, el Centro de Desarrollo Local y los institutos Francisco Ros Giner, Príncipe de Asturias y Ramón Arcas. Todos estos equipamientos, que hasta ahora “vivían de espaldas” a la vía, pasarán a “abrazar” un corredor peatonal y ciclista con uso diurno y nocturno, dotado de iluminación segura integrada en edificios e infraestructuras.
El alcalde compara la operación con experiencias de ciudades como L’Hospitalet, Logroño o Alicante y, a escala internacional, Zúrich, Boston o Tokio, donde el soterramiento de vías o desvíos de carreteras permitió crear parques lineales como la Rose Kennedy Greenway tras el desvío de la interestatal 93 en Boston. El objetivo es que Lorca “redibuje su futuro urbano”, eliminando el “parapeto” que separaba ciudad y barrios y reduciendo la contaminación acústica y ambiental.
Cercanías, Rambla de Biznaga y Zonas de Flujo Preferente
En el Consejo Social también se reclamará que las administraciones cumplan el compromiso de recuperar el servicio de trenes de Cercanías la próxima primavera, utilizando la estación de San Diego como punto provisional de llegada y salida y como terminal transitoria del AVE mientras duren las obras de soterramiento. Gil insistirá en la necesidad de que el restablecimiento de frecuencias se produzca en la fecha comprometida para no prolongar el aislamiento ferroviario del municipio.
El alcalde exigirá al Ministerio para la Transición Ecológica el impulso del proyecto de encauzamiento de la Rambla de Biznaga, con presas de laminación, diques, canalizaciones y limpieza de cauces para prevenir episodios de avenidas como los registrados históricamente. También calificará de “fuera de control” la situación de las Zonas de Flujo Preferente, que a su juicio suponen una “expropiación encubierta” de miles de viviendas y pequeños negocios por la imposición de limitaciones urbanísticas ligadas a caudales punta de avenida muy elevados.
Agenda “Vive Lorca Viva” y papel del Consejo Social
La sesión permitirá además repasar la agenda “Vive Lorca Viva”, un calendario cada vez más amplio de actividades culturales, deportivas y de ocio que se coordina entre todas las concejalías y se vuelca en la plataforma “Visit Lorca” para facilitar la planificación de estancias a vecinos y visitantes. Se informará asimismo de avances en grandes infraestructuras, política de agua y medidas contra la despoblación en pedanías impulsadas por la Concejalía de Vertebración del Territorio.
La edil de Participación Ciudadana, María Teresa Ortega, ha resaltado el refuerzo del Consejo Social y de sus mesas de trabajo, que este año celebran dos sesiones plenarias y reuniones periódicas en comisiones sobre modelo de ciudad, casco histórico y equilibrio territorial, además del seguimiento del Plan Director de Transformación Digital y Ciudad Inteligente. Según la concejala, este mayor dinamismo permite que el órgano consulte y canalice con más eficacia la voz de entidades y colectivos en las grandes decisiones estratégicas de Lorca.
