Lamenta que la rectificación de los módulos para algunas actividades agrícolas y ganaderas “no ha tenido en cuenta la situación de esta producción en la Región de Murcia”
El Gobierno regional, a través de la consejería de Agricultura, ha reclamado del Ejecutivo nacional la rectificación de los módulos del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas de 2022 a aplicar en el cultivo del tomate en la Región de Murcia.
El consejero Antonio Luengo explicó que, tras haberse publicado el pasado mes de abril la Orden del ministerio de Agricultura por la que se reducen para el período impositivo 2022 los índices de rendimiento neto y la reducción general aplicables en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas para las actividades agrícolas y ganaderas afectadas por diversas circunstancias excepcionales, “hemos comprobado que no se ha tenido en cuenta la gravísima situación del cultivo del tomate en la Región de Murcia, que ya habíamos comunicado al Ministerio en el mes de febrero”.
Detalló Luengo que “es un cultivo de primor, muy arraigado en algunas zonas, como los municipios de Lorca, Águilas y Mazarrón, y base de la economía de muchos pequeños y medianos agricultores, así como gran generador de puestos de trabajo, puesto que requiere abundante mano de obra durante todo el ciclo de cultivo, que en las zonas costeras donde se ubica, abarca todo el año”.
Las condiciones climáticas del último año “fueron bastante desfavorables, con gran alternancia de días cálidos o muy cálidos y abundantes días húmedos y nublados, muchos de ellos con temperaturas inferiores a las esperadas. Estas condiciones ralentizaron el desarrollo, interfirieron en la polinización y, en general, afectaron negativamente al rendimiento y la calidad de la cosecha, amén de propiciar la incidencia de plagas”, indicó.
“A este escenario desfavorable se suma, como en todos los demás cultivos, el aumento en los costes de producción debido, sobre todo, al aumento de los precios de los insumos causados por las diferentes circunstancias socioeconómicas, como la guerra de Ucrania, el aumento de los precios de las materias primas y el de los combustibles, entre otros”, subrayó el consejero, que puso de relieve el hecho de que los precios de venta para el tomate “han sido en general bajos, manteniéndose buena parte del año por debajo de su coste de producción”.
Debido a la situación excepcional de este cultivo en la Región de Murcia, de baja rentabilidad, pero gran generador de empleo, se solicita la reducción de módulos para el tomate en los municipios de Águilas, Lorca y Mazarrón, además de una rebaja de módulos general para paliar los efectos que son consecuencia del incremento de los costes de producción.