El Consejo de Ministros aprueba el plan de cuenca del Tajo que pone en riesgo el cultivo en mas de 27.000 hectáreas en Murcia, Alicante y Almería
El Consejo de Ministros aprobó esta mañana el Plan de Cuenca del Tajo, lo que supone cercenar y dejar al mínimo la cantidad de agua que se trasvase desde este río al Segura. De poco han servidos las protestas en Madrid, primero ante el Consejo de Estado y hoy mismo ante la Moncloa.
Este recortará llegará a ser de hasta 110 hectómetros cúbicos menos al año, lo que se producirá desde este año y hasta 2027. Por este motivo, los regantes de las áreas afectadas ya han anunciado que recurrirán a los tribunales.
Con esta decisión, el Gobierno fija el caudal ecológico del Tajo en siete metros cúbicos/segundo desde este año, hasta alcanzar los 8,65 m3/s en cuatro años.
En una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha afirmado que el Gobierno aprobará la próxima semana ayudas para subvencionar el agua desalada en Murcia y Alicante. El precio, que no incluye transportes e impuestos, será de 34 céntimos el metro cúbico.
Regantes del sureste español, encabezados el Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura (Scrats) se concentraron ante el Palacio de la Moncloa mientras se celebrara la reunión del Consejo de Ministros, para protestar por la aprobación de este plan de cuenca, que supone un recorte del trasvase al Segura y en consecuencia un recorte de recursos hídricos indispensables para la producción de frutas y hortalizas de Murcia, Alicante y Almería.
La protesta, convocada por el Scrats y apoyada por asociaciones del sector hortofrutícola como Proexport o Apoexpa, se prolongó durante toda la mañana en la avenida Puerta de Hierro, junto al Palacio de la Moncloa.
Este plan supone aumentar los caudales ecológicos incluida en el nuevo Plan Hidrológico del Tajo supondrá disminuir las aportaciones del trasvase al Segura en 105 hm3 (78 hm3 menos para regadío que la media actual y 27 hm3 menos para abastecimiento). Este recorte conllevará daños importantes para la hortofruticultura del arco mediterráneo, ya que las regiones afectadas por el trasvase representan el 71% de la exportación nacional de hortalizas y el 25% de la de frutas.
Para Proexport, Asociación de Productores-Exportadores, integrada en la patronal Fepex, no existen alternativas viables al recorte del agua disponible que proporciona el trasvase puesto que los recursos procedentes de las desaladoras serán insuficientes. Según el presidente de Proexport, Mariano Zapata, el trasvase supondrá un recorte del 40% del agua destinada a regadío”.
SOS a Agricultura
Proexport reclama también la intervención del ministro de Agricultura, Luis Planas, en favor del sector agrario, ya que, aunque es el ministerio para la Transición Ecológica el responsable de la política hidrológica, el recorte del trasvase conllevará la pérdida de 27.314 hectáreas de superficie cultivable de regadío en todo el levante español y la desaparición de más de 15.000 empleos.