Cooperativa Deilor, 30 años y segunda generación
La cooperativa agrícola Deilor, una de las grandes firmas de verduras y hortalizas del Valle del Guadalentín, acaba de superar los 30 años de trayectoria y vive ya plenamente su segunda generación de agricultores al frente, tras la jubilación de la mayoría de socios fundadores. Juan Francisco Avellaneda, hijo de uno de esos socios y actual presidente, subraya que el objetivo sigue siendo el mismo: unir la producción de los agricultores para comercializarla de forma conjunta, ganar fuerza en la venta y mejorar la rentabilidad del campo.
De brócoli y melón a un porfolio de 20 productos
Deilor nació en los años 90 prácticamente con dos cultivos principales: brócoli de invierno y melón de verano, además de algo de uva, pero hoy su catálogo roza la veintena de referencias. El producto con mayor valor añadido en la actualidad es el Bimi, una tipología de brócoli “premium”, junto a calabaza Butternut, hinojo, colirrábano, apio, col china y otras hortalizas que han ido ganando protagonismo según la cooperativa ha ido adaptando su estrategia a los cambios del mercado de los últimos años.
Valle del Guadalentín, clima suave y agricultura tecnificada
Toda la producción de Deilor se concentra en el Valle del Guadalentín, una zona históricamente agrícola donde los inviernos suaves permiten abastecer a los mercados europeos entre noviembre y mayo, cuando muchos países de destino no pueden producir. Avellaneda destaca que, pese a contar hoy con menos recursos hídricos que en el pasado, la tecnificación del regadío y de los cultivos permite aprovechar mejor el agua y avanzar hacia una agricultura más eficiente y sostenible.
Certificaciones, exportación y retos de futuro
La cooperativa trabaja con un amplio abanico de certificaciones europeas –en torno a ocho o nueve sellos de calidad– exigidas por sus clientes, lo que obliga a un modelo de producción cada vez más sostenible. Su mercado sigue siendo principalmente internacional, aunque en los últimos años han reforzado también la presencia en el mercado nacional; entre los principales retos, el presidente señala el relevo generacional, el incremento de costes tras la pandemia y la competencia de países terceros con menores costes de producción.
Impulso al Pimentón de Murcia y mensaje navideño
Como miembro del Consejo Rector de la Denominación de Origen Pimentón de Murcia, Avellaneda remarca el carácter emblemático del pimentón y del pimiento de bola en Totana, un cultivo que ha perdido peso pero que vive un cierto repunte gracias al reconocimiento de su calidad frente a productos importados más baratos. La DO ha obtenido una subvención para 2026 que permitirá financiar acciones de promoción, ferias y eventos, en coordinación con la asociación “Origen de Murcia” que agrupa a las siete denominaciones de origen regionales; el presidente aprovecha la llegada de la Navidad para pedir que no se olvide el papel del sector primario como motor económico y reivindica las cestas navideñas con productos de la tierra como la opción “más valiosa y más sana”.
