Ante esta situación se recomienda controlar la refrigeración de las casas y edificios públicos, el uso compartido del coche, la utilización del transporte público, usar los aparcamientos disuasorios, realizar una conducción eficiente, limitar la velocidad y no realizar ejercicio físico intenso al aire libre
La Concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Lorca, María Hernández, ha informado que en nuestro municipio se produjo ayer un incremento de partículas PM10 en el aire debido a un episodio de intrusión de polvo sahariano.
María Hernández ha indicado que “de acuerdo al Protocolo del Marco de Actuación Municipal ante episodios ambientales de contaminación de NO2 y PM10, informamos que la presencia de masas de aire de origen africano sobre la Península Ibérica provoco ayer, 10 de julio, el incremento de dichas partículas en el municipio de Lorca”.
La Concejal de Medio Ambiente ha detallado que “ayer se registraba el Nivel 1 (PREVENTIVO) para las partículas PM10 en la estación de medida de Lorca, con un promedio diario de 56,32 µg/m3 lo que implica, según RD 102/2011, la superación del valor límite diario en 1 ocasión de las 35 veces permitidas por año civil. Se trata de un incremento de estos niveles de PM10 recogidos en la Red de Calidad del Aire que coincide con la predicción de intrusión de masas de aire de origen africano sobre la Península Ibérica”.
Hernández ha añadido que “la semana pasada ya tuvimos en nuestro municipio esta situación, además, en los próximos días podremos volver a superar estos valores, ya que la previsión meteorológica prevé un aumento de los niveles que están afectando al sureste peninsular, estimándose concentraciones de polvo en superficie en el rango 10-200 μg/m3. Además, según el modelo SKIRON, también puede producirse depósito seco de polvo sobre casi toda la península y húmedo sobre el sureste a lo largo del día”.
La Edil de Medio Ambiente ha recordado que “ante estas situaciones se recomienda seguir una serie de medidas de prevención con el fin de evitar el aumento de estas partículas, entre las que se encuentran controlar la refrigeración de las casas y edificios públicos, minimizando así el consumo energético, el uso compartido del coche privado, la utilización del transporte público en los desplazamientos; así como usar los aparcamientos disuasorios en las afueras de la ciudad, realizar una conducción eficiente evitando las paradas y los arranques bruscos, limitar la velocidad y otras medidas preventivas en relación con la salud, como no realizar ejercicio físico intenso al aire libre”.