El ayuntamiento de Lorca ha conmemorado la persona de Miguel Ángel Blanco con un minuto de silencio en honor del político asesinado por el grupo terrorista ETA y la lectura de un manifiesto en recuerdo del fatídico acontecimiento.
Miguel Ángel Blanco fue concejal de la localidad vizcaína de Ermua por el Partido Popular entre 1995 y 1997, hasta su secuestro y asesinato por la banda terrorista ETA a la edad de 29 años. Tras el desenlace, millones de personas salieron a la calle mostrando de manera multitudinaria su repulsa ante la violencia causada por el grupo terrorista.
El Alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, junto a otros miembros del equipo de gobierno, han guardado esta mañana en la Plaza de España un minuto de silencio en honor al concejal de la localidad vizcaína de Ermua Miguel Ángel Blanco, secuestrado y asesinado por el grupo terrorista Euskadi Ta Askatasuna (ETA) en 1997 a la edad de 29 años.
Durante el acto, representantes del Encuentro Nacional de Jóvenes de Hermandades y Cofradías (JOHC) han leído un manifiesto en recuerdo del fatídico acontecimiento, resaltando, entre otros, la defensa del Estado de Derecho.
Tras esta emotiva lectura, el alcalde ha explicado que “desde el Ayuntamiento de Lorca presentaremos una propuesta para que los centros educativos del municipio den a conocer a sus alumnos quién fue este joven político cuya vida se vio truncada cuando aún no había cumplido 30 años. Este fatal acontecimiento y la respuesta masiva conocida como ‘el espíritu de Ermua’ no debe ser olvidada. Esta es una iniciativa que busca honrar su memoria y a sus familias; y recordar a las generaciones venideras lo que supuso este momento en la historia de nuestro país. Fracasamos como sociedad si no protegemos y difundimos el legado de quienes dedicaron su vida por la libertad y la democracia. Hay generaciones, las más jóvenes, que desconocen esta parte de nuestra historia, y no lo podemos permitir.”.
Fulgencio Gil, alcalde de Lorca, ha destacado que “este acto que celebramos cada año recuerda la unión de los españoles frente a la barbarie y el terror. No podemos olvidar el sufrimiento de las familias que han vivido en sus carnes el daño causado por ETA; ni a Miguel Ángel Blanco, a quien recordamos esta cita en honor a su memoria, que perdurará para siempre, formando parte de la victoria contra el terrorismo”.
Gil Jódar ha manifestado que “es imprescindible recordar que el ‘espíritu de Ermua’ nació en 1997 como un movimiento cívico espontáneo, tras el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco. El pueblo español se levantó y perdió el miedo a expresarse frente a la violencia de ETA. Recordemos las millones de manos blancas que inundaban las calles de toda España dando como resultado un momento histórico”.