Los estafadores suplantaron a la empresa eléctrica para desviar pagos a una cuenta fraudulenta
La Guardia Civil de la Región de Murcia ha esclarecido una ciberestafa que afectó al Ayuntamiento de Torre Pacheco y que ascendía a cerca de medio millón de euros. La operación, bautizada como Financiero, ha permitido recuperar los 455.000 euros defraudados y detener a tres personas, mientras que el supuesto cabecilla del grupo criminal permanece en busca y captura.
La investigación se inició tras la denuncia presentada en marzo del pasado año, cuando el consistorio detectó irregularidades en el pago de varias facturas. Los delincuentes, especializados en el método conocido como man in the middle, habían suplantado a la empresa suministradora de electricidad del Ayuntamiento. Tras obtener información sobre facturas pendientes, contactaron telemáticamente con los departamentos municipales haciéndose pasar por la compañía y solicitaron el abono de los importes, que rondaban el medio millón de euros.
El engaño se materializó al pedir que las transferencias se realizaran a una cuenta bancaria distinta, con la excusa de que la habitual había sido cancelada. Poco después, el fraude quedó al descubierto cuando la empresa eléctrica legítima reclamó el pago de las facturas.
Gracias a la rápida actuación de la Guardia Civil, la cuenta fraudulenta fue bloqueada judicialmente antes de que los fondos pudieran transferirse a otros destinos. La investigación permitió detener en Valencia a una mujer que figuraba como titular de la cuenta y que habría actuado como ‘mula’, recibiendo una compensación económica a cambio.
Posteriormente, las pesquisas llevaron a la detención de dos hermanos con antecedentes por delitos similares, señalados como captadores y miembros activos de la red. Ambos habían mantenido contactos en Madrid con un ciudadano de 34 años, considerado el líder intelectual de la trama. Este individuo, que carecía de domicilio en España, se alojaba en hoteles de lujo y hacía ostentación de un elevado nivel de vida.
La Guardia Civil ha identificado plenamente al sospechoso, sobre el que pesan requisitorias de búsqueda y detención. Además, se ha descubierto que una de las cuentas manejadas por el grupo también fue utilizada para estafar a una empresa farmacéutica portuguesa con idéntico modus operandi.
Hasta el momento, la operación Financiero ha permitido la detención de tres personas por los presuntos delitos de estafa y pertenencia a grupo criminal. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.