El presidente regional, Fernando López Miras, ha tomado la palabra en el II Foro Económico y Social del Mediterráneo para reivindicar con firmeza la necesidad de un Plan Nacional del Agua en España.
Desde su intervención, ha insistido en que este plan debe centrarse en acciones concretas que permitan modernizar, depurar y optimizar el uso de los recursos hídricos a nivel nacional. Como ejemplo de buenas prácticas, ha destacado que la Región de Murcia reutiliza el 98% de sus aguas urbanas, logrando un alto nivel de sostenibilidad en su gestión hídrica.
López Miras ha llamado a un acuerdo “urgente” en el ámbito estatal sobre el agua, argumentando que sin un plan común y unas infraestructuras adecuadas, será imposible avanzar y solucionar los problemas que afectan a los ciudadanos en materia de abastecimiento y gestión del recurso. En ese sentido, ha reclamado que el plan cuente con un presupuesto suficiente y que las inversiones permitan que el agua llegue allí donde más falta hace, en los momentos en que se requiere, sin importar las dificultades existentes.
Asimismo, ha defendido el trasvase Tajo-Segura como una herramienta crucial para hacer frente al cambio climático, señalando que riega 50 millones de árboles, que actúan como sumideros de carbono y aportan beneficios ecológicos equivalentes a los de una población de un medio millón de habitantes. López Miras criticó firmemente los ataques políticos y decisiones arbitrarias que ponen en riesgo esa infraestructura, considerándola vital para el Levante español y el resto del país.
El líder regional también propuso que la Región de Murcia sea considerada en Europa como un área piloto para estudiar fenómenos climáticos extremos y la desertización, dado que el territorio está particularmente expuesto a estos riesgos. La comunidad cuenta con más de 85 millones de árboles, convirtiéndola en un “laboratorio vivo” para probar nuevas metodologías de gestión hídrica y climática.
Por otro lado, López Miras hizo un llamamiento a la cooperación y a evitar confrontaciones que solo dificultan los avances. Pidió que las administraciones trabajen juntas en una planificación adecuada, actuando con decisión y garantizando soluciones eficientes frente a la emergencia climática. En su opinión, la situación actual en España es precaria y requiere de un liderazgo fuerte que lidere los cambios necesarios para garantizar el futuro del país en materia hídrica y climática.
Su intervención concluyó con un mensaje de esperanza y denuncia: “Las ideas, las reflexiones y las propuestas que surjan en este foro necesitan un Gobierno que actúe, decida y lo haga posible. Y, lamentablemente, España en este momento carece de él”.