El Partido Popular (PP) ha manifestado su postura de que el tren de Cercanías debe acceder a la actual estación de Águilas, ya sea mediante un soterramiento o en viaducto, pero nunca quedando en las afueras. Según el PP, dejar el tren fuera de la ciudad «condenaría a Águilas» y el partido no está dispuesto a permitirlo, según un comunicado del grupo.
Esta posición ha sido defendida por José Francisco Lajara, secretario ejecutivo de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda del PPRM, y por Eva Reverte, presidenta del PP de Águilas. Ambos argumentan que la propuesta presentada por el Gobierno central «no busca integrar el tren, sino expulsarlo de Águilas», lo que ocasionaría problemas adicionales de accesibilidad y llevaría a los ciudadanos a depender del coche o del autobús.
Reverte destacó que otros municipios de la región han optado por métodos de integración del tren como soterramientos y viaductos, afirmando que «Águilas no merece menos». Además, mencionó que «hay por lo menos seis ciudades en España donde se ha aceptado o se está evaluando la integración».
Sin embargo, Reverte criticó que en Águilas se bloquean alternativas sin dar oportunidad de respuesta a los vecinos, en un enfoque que califica como «típico de la alcaldesa de Águilas». También aclaró que la presentación de alegaciones no debería considerarse como una forma de retrasar el proceso.
«Lo que dice la alcaldesa es falso; intenta manipular a los ciudadanos. Todo proyecto de este tipo debe seguir un procedimiento legal», enfatizó Reverte. Añadió que «es inaceptable que la alcaldesa acepte que Águilas pierda su histórica estación por sumisión a sus siglas, ignorando a los colectivos y vecinos que tienen derecho a presentar sus alegaciones».
Además, según Reverte, una de las consecuencias más evidentes del traslado de la estación sería la desaparición del conocido «tren del baño», que durante años ha facilitado a miles de turistas el acceso al transporte público a pocos metros de la playa.