COAG alerta sobre la crisis en la ganadería extensiva y exige soluciones para la supervivencia del sector en el foro convocado por el ministerio de Agricultura en Toledo
Cada año, 1.550 ganaderos en régimen extensivo se ven obligados a cerrar sus explotaciones. Desde 2006, España ha perdido 21.946 de vaca nodriza y 6.132 de ovino de carne. Aunque la media de animales por explotación ha aumentado un 32% en el vacuno extensivo, el futuro de esta actividad está en riesgo, especialmente para los pequeños y medianos ganaderos familiares.
En el Foro de diálogo para la Ganadería Extensiva, convocado por el ministerio de Agricultura los días 16 y 17 de mayo en Toledo, la organización agraria COAG presentará una serie de reivindicaciones críticas para la supervivencia del sector. Ángeles Santos, responsable de Ganadería Extensiva de la Ejecutiva de COAG, subrayó la oposición de la organización a la imposición del veterinario de explotación y del plan sanitario integral, calificándola como una medida que excede la normativa europea y que añadiría costos y burocracia sin mejorar el bienestar animal.
La delegación de la organización incluye a Santos, Joaquín Gargallo (responsable del sector de vacuno de carne), Antonio Punzano (responsable del sector ovino-caprino), Isabel Villalba (secretaria general del Sindicato Lábrego Galego), José Manuel Cortés (presidente de COAG Salamanca) y la técnica de Ganadería Iria Costela, donde abordarán diversos problemas, como la falta de precios e ingresos, la sanidad animal, los mataderos y la comercialización, así como el relevo generacional y la incidencia del lobo y otros animales salvajes.
Además de rechazar las imposiciones normativas mencionadas, COAG destacará la necesidad de recuperar ayudas a las Asociaciones de Defensa Sanitaria (ADS) y de facilitar la venta directa de productos desde las ganaderías en régimen extensivo. Esto incluye la creación de una red pública de mataderos móviles y la flexibilización de los requisitos para la producción y distribución de productos en circuitos cortos de comercialización.
La organización también solicitará la suspensión de la inclusión del lobo en el Listado de Especies en Régimen de Protección Especial (LESPRE) y se opondrá a los acuerdos de libre comercio que perjudiquen al sector.