Hay un 60% menos de trabajadores sociales de los recomendados por organismos profesionales, se trabaja en dependencias reducidas e inadecuadas que no garantizan una correcta prestación del servicio, y no hay una política clara definida con objetivos a alcanzar más allá de la burocracia de las ayudas
El portavoz de la coalición de izquierdas (IU+P+AV) en el Ayuntamiento de Lorca, Pedro Sosa, anunciaba esta mañana ante los medios de comunicación una de las iniciativas que defenderá en el próximo pleno y que tiene que ver con las evidentes deficiencias que en todos los órdenes presenta la prestación de las políticas sociales en Lorca.
Sosa afirma que esas deficiencias son de tres órdenes: recursos humanos, infraestructuras materiales y definición de políticas públicas.
Por lo que hace a los RRHH, el edil de izquierdas afirma que en la actualidad el número de trabajadores sociales del Ayuntamiento de Lorca es de 13, cuando la recomendación que establece el Consejo General de Trabajadores Sociales (CGTS) es que exista 1 trabajador social por cada 3000 habitantes. Una ratio que obligaría al Ayuntamiento de Lorca a contar con hasta 33 trabajadores sociales. Existe por tanto un déficit del 60 % de profesionales del trabajo social en Lorca, que se palpa y evidencia en sus calles y en sus barrios.
Ese déficit también está presente cuando pasamos a analizar la infraestructura material y las dependencias públicas en las que desarrollan su labor estos profesionales. La falta de espacio de las actuales instalaciones públicas destinadas a ello llega al punto de que a veces las trabajadoras del centro han de atender a las personas que allí acuden en los pasillos o en habitaciones inadecuadas. Una situación injusta y hasta denigrante para los usuarios, una falta de respeto a sus derechos a la intimidad cuando deben revelar delante de extraños datos muy sensibles, y algo también insostenible para los profesionales que allí ejercen su labor. Y todo ello, abunda Sosa, cuando justo enfrente, las plantas tercera y cuarta del Centro de Desarrollo Local (CDL) están actualmente vacías y en desuso, y cuando hace tres meses el gobierno local, a través de la por entonces concejal concernida, nos decía que estaban encima del asunto para darle una solución inmediata.
Por último, e igualmente importante, Sosa ha denunciado que no hay una política pública clara y definida en materia social, que haga diagnósticos sociales y concrete los objetivos a alcanzar, más allá de la burocracia de las ayudas. Sosa afirma que una vez que se cruza el umbral de la exclusión social es muy difícil salir sin una intervención planificada y dotada de recursos por parte de los organismos competentes, y que por ello hay que exigir compromiso público, justicia social, diligencia en la prestación y transparencia sobre las políticas y los recursos. Extremos todos ellos que su formación política exigirá a la concejal de VOX que se ha hecho con las competencias de esta concejalía tras el pacto de gobierno de las derechas de Lorca.